Para aprender a mantener nuestro peso una vez nos hayamos quitado esos kilos que nos sobran, es fundamental mantener unos buenos hábitos de vida.

Eso es, toca cambiar totalmente de chip. Éstos hábitos tienen que empezar a formar parte de tu día a día como una filosofía de vida grabada a fuego.

¿De qué te va a servir adelgazar si cuando salgas de la consulta del Dietísta vas a volver a las viejas andadas?

Por eso antes de nada, hay que educarse en los hábitos diarios. Con pequeños y constantes gestos, que nos van a aportar beneficios grandes para toda una vida.

Hábitos a aplicar en tu día a día:

  • Ve a comprar con el estómago lleno. Ir a comprar con hambre nos lleva a la compra compulsiva sin pensar y caemos en la trampa de la comida rápida y de productos que en realidad no necesitamos. Éstos se van a terminar por desecharse por exceso. Cambiar este habito ayuda a tener el control sobre tu compra, prestando más atención a la calidad de cada producto, fijándote en las etiquetas.
  • Haz una lista de compra, de esta manera harás una compra sostenible y no cargarás con productos que ya tienes en casa. Así evitarás desechar comida o incluso repetir alimentos solo por no tirarla.
  • Reemplaza el picoteo entre horas por el ejercicio, 60 minutos de ejercicio moderado al día es suficiente para gozar de una vida sana. Si eres de esas personas que se agobia por el tiempo, distribuye esos 60 minutos como más te convenga. Puedes empezar yendo a hacer la compra andando, subir las escaleras en lugar de usar el ascensor. Si trabajas y tienes el puesto relativamente cerca, puedes empezar a ir andando. Te aseguro que llegaras mucho mas relajad@ que en coche.
  • Guardar los alimentos fuera de tu vista, quita la mesa después de comer y así evitas los excesos.
  • La comida es también para disfrutarla, las prisas no son buenas para la hora de comer. Se recomienda dejar descansar el tenedor entre cada bocado y masticar bien antes de tragar.
  • Siempre es mejor compartir, estos comportamientos se refuerzan muchas veces gracias a la familia y las amistades. Cuando estamos solos, raras veces nos apetece elaborar platos completos y ricos. Lo que solemos buscar es la rapidez y que nos sacie el hambre del momento, esto nos lleva a los procesados y la comida basura.

Créeme si te digo que cambiando tus hábitos y aprendiendo a comer bien, ya tienes mucho camino recorrido.

Espero que lo pongas en práctica y descubras sus ventajas. Y si te animas, déjame un comentario aquí para saber que te ha gustado, también puedes dejarme sugerencias para próximos Posts.

Gracias a tod@s por formar parte de Dietoteca, os mando un abrazo y hasta el próximo Post.