Allium sativum L.

Hola Dietotequers

Hoy hablaremos sobre las maravillas de nuestra cosmopolita Herbácea, el Ajo.

El Ajo es y ha sido un ingrediente imprescindible en la cocina Mediterránea y no es de extrañar. Gracias a sus múltiples propiedad, se le puede considerar el ingrediente «milagroso».

Composición:

Famoso por su particular olor, que a algun@s les resulta desagradable. El responsable de este particular aroma del ajo, es un aminoácido sulfurado sin olor, que en contacto con el aire se transforma en alicina. Esta sustancia , que se libera cuando cortamos el ajo, es la responsable de tantos lloros.

Además aporta también cantidades nada despreciables de proteínas, yodo, fósforo, potasio, vitamina B6.

Propiedades:

  • Es antiagregante plaquetario.
  • Hipoglucemiáne (Recomendado en Diabetes).
  • Protector del corazón.
  • Reductor de colesterol, tensión arterial.
  • Diurético.
  • Antiinflamatorio.
  • Previene las enfermedades carediovasculares.
  • Aumenta la secreción del estómago y la bilis.
  • Tiene propiedades antisépticas.

Por su contenido en yodo, aumenta la actividad de la tiroides. En grandes dosis tiene efecto contrario, por lo que no hay que abusar.

¿Cómo eliminar o reducir el aroma?

Un pequeño truco sería eliminar el gérmen ( aunque ésta es la parte que nos interesa nutricionalmente, que contiene mayor cantidad de enzimas). Otra manera de suavizar su sabor intenso, sería añadirlo entero en los guisos.

Usos:

  • Remedio para lombrices.
  • Antiacne.
  • Jarabe de ajo y miel para la bronquitis.
  • Sopa de ajo. Me detengo en esta última, porque ya sabéis que me encanta la cocina y que mejor manera de acabar el post, que con una futura receta. Ademas de ser nutritiva es medicinal.

Espero que haya sido de utilidad y os haya gustado. Dejadme vuestros comentarios con vuestras ideas o sugerencias para próximos Posts.

Hasta la vista, Dietotequers.