Hola Dietotequers

Para estos días de confinamiento, he traído una receta para hacer en colaboración con los mas pequeños de la casa. Esta es la mejor manera de que coman esa verdura que de otra forma ni la hubieran probado.

Hoy vamos a preparar una pizza casera. Esta receta se ha hecho con ingredientes ya disponibles en la despensa. Si te falta alguno de ellos o prefieres añadir otros, no habría ningún problema. El objetivo es disfrutar cocinando en familia.

Elaboración:

Abrimos la levadura con el azúcar y muy poquito de agua templada, lo removemos y lo dejamos reposar hasta que burbujee.

En un bol grande introducimos la harina y le echamos la sal, el aceite y poco a poco vamos introduciendo el agua mientras lo vamos amasando. Llegados a este punto, la levadura ya estará lista para mezclar lo con el resto de ingredientes y seguir amasando. Si vemos que la masa aun se nos pega en los dedos podemos ir añadiendo más harina hasta que la masa vaya cogiendo fuerza.

Una vez esté la masa lista, lo cubrimos con una toalla y lo dejamos reposar en un sitio caluroso durante 20 min.

Pasado este tiempo volvemos a amasarlo y de nuevo lo dejamos reposar unos 15 min.

Mientras reposa la masa, cortamos la cebolla al gusto y lo rehogamos a fuego medio y añadimos los tomates pelados y cortados, sazonamos al gusto. Esta será la base de nuestra pizza. También cortamos los filetes de pollo a gusto y lo rehogamos en una sartén diferente.

Ahora que tenemos todos estos ingredientes listos, volvemos a amasar la masa de la pizza y la abrimos.

Ponemos la masa en la bandeja y lo metemos al horno precalentado a 175°C hasta que la masa suba.

Una vez que esté la masa subida lo sacamos del horno, integramos la salsa de tomate y le echamos por encima el pollo. Si queremos también podemos cortar en daditos, medio pimiento rojo y también lo integramos en la masa antes de meterlo de nuevo al horno.

Por último cuando veamos que la pizza se ha dorado, integramos el queso y esperamos que se funda.

Recordaros que este tipo de recetas no es para hacer a diario, sino para ocasiones. Uno de los objetivos es que los niñ@s coman alimentos que de normal rechazarían, pero al haber formado parte de la elaboración, harán el esfuerzo de probarlo.

Un abrazo a tod@s y hasta el próximo Post